Hoy me entero con la desgarradora noticia de que decidiste arrebatarte tu transitar terrenal.
Entre el dolor más profundo y la alegría más indescriptible de que hayas pasado por mi vida y hacerme ver todo de la manera más dulce y amable.
En un mundo gris, saltabas como confeti a transformar la vida de quien tocara tu puerta, yo tuve tan grandiosa oportunidad; que dichosa fui.
Espero verte en mil reencarnaciones en todas tus formas, en todos tus métodos, en todos tus gestos, en todas tus luchas, eres indescriptible, estoy haciendo acá un intento de agradecerte.
Si hay alguien que representara el verdadero concepto de la amistad fuiste tú: leal, alegre, honesta, pero sobretodo, nunca colocabas a nada ni a nadie por encima del valor de una amistad, siempre supiste lo difícil de conseguir a un buen amigo.
Eres única, solo puedo dar las gracias, una madre inolvidable, una amiga inolvidable; serás inolvidable querida profe.