He visto tantas cosas, que aún no sé si lo he visto todo.
No tengo expectativa alguna para evitar las decepciones, pero temo perder la emoción de ser estafada en mis emociones.
Tengo pocos temores en este minuto, incluida la muerte, debe estar tan aburrida como yo esperando se acaben algunas patéticas vidas.
Vidas inoperativas, inertes y carentes de cualquier chispa divina, vidas que solo esperan con ansias fenecer.
Veo como indolentemente gente se pavonea con sus miserias antes quienes consideran carentes de todo derecho, como si quien no tiene escogió esos filosos atajos.